viernes, 16 de febrero de 2007

La Madre Rusia hace 'pucheritos'

Rusia amenaza con abandonar el tratado de reducción de armamento nuclear.Hoy sale reflejada en 20minutos la noticia en la cual se afirma que "Rusia marca distancias con EEUU y amenaza ahora con salirse de los tratados antiproliferación". Parece ser que a la denostada Madre Rusia no le ha sentado bien el último plan de la Administración Bush, para proveer a Europa de un escudo antimisiles digno de una gran película de ciencia ficción.

Así, el déspota y autócrata Vladímir Putin amenaza con salirse del tratado de reducción de armas nucleares suscrito por los americanos y los rusos, a finales de la Guerra Fría, para deshacerse de misiles nucleares de mediano y corto alcance, los cuales intimidaban, terríblemente, el ansia de calma de las dos superpotencias por aquellos maravillosos años.

El problema que tiene Rusia con este nuevo meneo de los gringos por la vieja Europa no son las instalaciones de misiles en sí, ya que éstas no apuntan ni estarían ahí para amenazar a la menguada Rusia, sino el área de influencia que abarcaría el emplazamiento de todo lo que conlleva ubicar unos misiles. La logística y los servicios de espionaje se asentarían buenamente en países como Polonia y República Checa, verdaderos talismanes de antiguos pactos de la extinta Unión Soviética, como el Pacto de Varsovia, antagónico de la superviviente OTAN.

El tirano Putin no desea que su, cada vez menos, área para la extorsión de sus antiguas repúblicas socialistas y países de Europa del Este, afines al desgraciado ideal comunista, se engalanen del arquetipo estadounidense que está haciendo crecer, según ese modelo, rápidamente a la Europa Occidental y, más lentamente, atrayendo a su círculo a todos los Estados que en un tiempo fueron peligrosos y, ahora, deambulan por el panorama internacional sin la peligrosa idea estalinista.

Lo que traen esos misiles a tierras polacas y checas no es una amenaza armamentística para nadie, pero sí pudiera ser una intimidación a la cobertura de influencia que proporciona Moscú, todavía, a los antiguos amigos de comparsa socialista marxista.

Tampoco se debe olvidar que los países señalados como pertenecientes al Eje del Mal, por el falto de gracia, George W. Bush en los que, casualidades de la vida, está Irán, la cuál tiene más consanguinidad con las tretas moscovitas y chinas que con las yankees o europeas, tienen una vinculación más que directa con los intereses anti-americanos. Así que cada uno hace su trabajo pero, como ya viene siendo habitual desde hace unas décadas, quién lleva el caballo perdedor no son los americanos precisamente.

No hay comentarios: